El colágeno es un tipo de proteína que constituye el tejido conectivo en muchas partes del cuerpo, incluyendo la piel, tendones, cartílagos, huesos, ligamentos y músculos. Desempeña un papel importante en el mantenimiento de la estructura y la fuerza de estos tejidos y órganos. La elastina es otro tipo de proteína que se encuentra en el tejido conectivo que ayuda a los tejidos a ganar la capacidad de estirarse y volver a su forma original después de estirarse. El colágeno y la elastina también están presentes en la vagina, donde ayudan a mantenerla fuerte y flexible.
Las paredes de la vagina están compuestas por capas delgadas de tejido llamadas mucosas. La capa externa de la vagina contiene más colágeno que la capa interna, que tiene una mayor concentración de elastina. Esta diferencia permite que la vagina se expanda durante las relaciones sexuales, manteniéndose lo suficientemente densa como para evitar la fuga de esperma.
Durante la excitación, el flujo sanguíneo a la vagina aumenta, lo que hace que las fibras musculares se contraigan y se vuelvan más gruesas. Esto crea fricciones entre las parejas durante el sexo, aumentando el placer para ambas personas involucradas.
Cuando una mujer queda embarazada, los cambios hormonales provocan relajación y dilatación de las paredes vaginales, dejando espacio para la cabeza del bebé durante el parto.
Sin embargo, esto puede causar una pérdida de elasticidad si la mujer no vuelve a su tamaño normal después del parto. La sequedad o atrofia vaginal también puede ocurrir con la edad o a partir de ciertos medicamentos. Además de afectar la función sexual, la pérdida de elasticidad puede aumentar la probabilidad de incontinencia urinaria y otras enfermedades del suelo pélvico.
Hay muchos productos en el mercado diseñados para restaurar la elasticidad vaginal, incluyendo cremas, geles, supositorios y dispositivos. Algunos contienen estrógeno u otras hormonas que pueden ser absorbidas en el cuerpo a través de la piel. Otros utilizan calor, frío o electroestimulación para promover la curación y regeneración de las fibras de colágeno y elastina.
A pesar de estas opciones, actualmente no hay manera de reemplazar completamente el colágeno perdido y la elastina en la vagina sin cirugía.
Sin embargo, mantener buenos hábitos de salud general, como una dieta equilibrada, ejercicio regular y practicar sexo seguro, puede ayudar a mantener la vagina sana y flexible con el tiempo.