El miembro sexual es un órgano que poseen los mamíferos masculinos, y juega un papel crucial en su sistema reproductivo. Consta de tres partes principales, a saber: la raíz, la varilla y la cabeza. La raíz se encuentra cerca del hueso púbico, mientras que la varilla se extiende hasta la punta o cabeza, que es el extremo bulboso que forma la abertura urinaria para los hombres. La uretra pasa por el medio de la varilla y se abre en la punta para expulsar el semen durante la eyaculación. La disfunción eréctil puede definirse como la incapacidad de alcanzar o mantener la erección lo suficientemente firme para las relaciones sexuales u otros tipos de estimulación física. Esta afección afecta aproximadamente a la mitad de los hombres mayores de cuarenta años y puede tener consecuencias emocionales y psicológicas, como baja autoestima y depresión. El pene no contiene huesos; así, su erección se basa exclusivamente en el flujo sanguíneo y la acción muscular. Durante la excitación, el cerebro envía señales al sistema nervioso para relajar los músculos lisos alrededor del pene, permitiendo un mayor flujo de sangre a los tejidos esponjosos en el cuerpo cavernoso. La presión emergente provoca rigidez y dureza del pene, lo que lo hace apto para la actividad sexual. Aunque algunos estudios sugieren que el estrés, la ansiedad y la fatiga pueden conducir a la disfunción eréctil, hay enfermedades como enfermedades cardíacas, diabetes y colesterol alto que también pueden causar este problema. Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos, cirugía, dispositivos de vacío, implantes y asesoramiento. Medicamentos como viagra y cialis ayudan a aumentar el flujo sanguíneo al bloquear las enzimas que descomponen el cGMP, la sustancia química encargada de regular el flujo sanguíneo. Los procedimientos quirúrgicos incluyen la implantación de varillas de silicona, alprostadilo (hormona sintética) o una prótesis del pene para crear rigidez durante el sexo.
En conclusión, la ausencia de huesos en el pene le permite lograr una erección a través del flujo sanguíneo y la acción muscular.
Sin embargo, varios factores pueden causar disfunción eréctil que puede requerir tratamiento y manejo para restablecer el funcionamiento normal.